La Dama Del Agua Leyenda Colombia

Hace mucho tiempo, en una aldea cercana al río Magdalena, vivía una joven llamada María, que era la hija de un rico hacendado. María era muy hermosa, de cabello rubio y ojos azules, y tenía muchos pretendientes, pero ella no se interesaba por ninguno. Su padre quería casarla con un hombre de su misma clase social, pero ella soñaba con el amor verdadero.

Un día, mientras paseaba por la orilla del río, María vio a un joven indígena que pescaba con una lanza. Quedó fascinada por su belleza y su destreza, y se acercó a él para hablarle. El joven se llamaba Tala, y era el hijo del cacique de una tribu que vivía al otro lado del río. Tala también se enamoró de María a primera vista, y le regaló un collar de perlas que había hecho con las conchas que encontraba en el agua.

María y Tala empezaron a verse a escondidas, cada vez que podían escapar de sus familias. Se juraron amor eterno, y planearon huir juntos para vivir en paz. Sin embargo, su secreto fue descubierto por el padre de María, que se enfureció al saber que su hija se había enamorado de un indio. Decidió castigarla severamente, y la encerró en su habitación, prohibiéndole salir o comunicarse con nadie.

María estaba desesperada, y solo pensaba en Tala. Una noche, logró escapar de su prisión, y corrió hacia el río para encontrarse con su amado. Pero cuando llegó a la orilla, vio una escena terrible: su padre y sus hombres habían atacado el poblado de Tala, y lo habían incendiado y saqueado. Entre las llamas y los cadáveres, María reconoció el cuerpo sin vida de Tala, que aún llevaba el collar de perlas que ella le había regalado.

María no pudo soportar el dolor, y se lanzó al río para abrazar a Tala por última vez. Pero el río estaba crecido por las lluvias, y la arrastró con fuerza hacia el fondo. María se ahogó junto a Tala, y sus almas se fundieron en el agua.

Desde entonces, se dice que María se convirtió en la dama del agua, una ninfa que protege el río y sus criaturas. Su cabello rubio se confunde con los rayos del sol que se reflejan en el agua, y sus ojos azules hipnotizan a los que la miran. La dama del agua busca a los jóvenes que se acercan al río, y los seduce con su belleza y su voz melodiosa. Pero también los castiga si son crueles o irrespetuosos con la naturaleza. La dama del agua solo quiere encontrar a Tala entre las aguas, y revivir su amor perdido.

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